Salento está situado al norte de la ciudad de Armenia a nueve kilómetros por la margen derecha de la carretera que de Armenia conduce a Pereira, luego de abandonar la autopista por un tramo de carretera en muy buen estado en un trayecto de otros nueve kilómetros.
Este municipio posee gran variedad de atractivos turísticos entre ellos el Valle del Cocora en donde se puede encontrar un paisaje lleno de naturaleza y hacer caminatas ecológicas. Se distingue por la arquitectura de su plaza, y de sus casas antiguas en bahareque y en tapias de barro, por la amabilidad y gentileza de sus pobladores, por sus hermosos paisajes y por su excelente clima.
Salento, Llamado el padre del Quindío por ser el municipio más antiguo de este departamento, es un municipio visitado por turistas nacionales y extranjeros, quienes llegan en busca de la atractiva naturaleza de esta región.
Salento, Llamado el padre del Quindío por ser el municipio más antiguo de este departamento, es un municipio visitado por turistas nacionales y extranjeros, quienes llegan en busca de la atractiva naturaleza de esta región.
Si bien, el turismo es la fuente principal de empleo. A lo largo de la calle y en ambos costados existen una gran variedad de almacenes y talleres de artesanías donde se exhiben trabajos en madera, guadua, fibras naturales, tejidos, joyería, entre otros. Además en algunos locales se encuentran productos alimenticios a base de café y restaurantes de comida típica.
Salento, es un municipio cargado de historia y reconocimiento, pero dese hace 5 años se viene presentando un fenómeno que tiene realmente preocupada a la comunidad. Niños y jóvenes de 7 a 16 años están expendiendo y consumiendo estupefacientes.
El panorama es alarmante, según el subteniente Elmer Rojas Comandante de la Estación de Policía de Salento, “Se están haciendo requisas semanalmente en el colegio debido al alto índice de venta y consumo que se está presentando en el municipio por parte de los menores de edad”.
Julián Andrés Orozco Manrique habitante del lugar, quien vive con dos sobrinos de 10 y 12 años de edad, comenta que en una ocasione llego a la madrugada a su casa y toco a la puerta, sus sobrinos le dijeron que ya le habrían y se demoraron alrededor de 2 minutos para abrirle la puerta, a él le pareció muy raro pero no se les dijo nada. Mientras buscaba unas herramientas para dejarlas listas para instalar unas cortinas al día siguiente se encontró con un maletín que nada tenía que ver con sus sobrinos, al abrirlo encontró: marihuana, 2 cajetillas de cigarrillo, una candela y basuco.
El panorama es alarmante, según el subteniente Elmer Rojas Comandante de la Estación de Policía de Salento, “Se están haciendo requisas semanalmente en el colegio debido al alto índice de venta y consumo que se está presentando en el municipio por parte de los menores de edad”.
Julián Andrés Orozco Manrique habitante del lugar, quien vive con dos sobrinos de 10 y 12 años de edad, comenta que en una ocasione llego a la madrugada a su casa y toco a la puerta, sus sobrinos le dijeron que ya le habrían y se demoraron alrededor de 2 minutos para abrirle la puerta, a él le pareció muy raro pero no se les dijo nada. Mientras buscaba unas herramientas para dejarlas listas para instalar unas cortinas al día siguiente se encontró con un maletín que nada tenía que ver con sus sobrinos, al abrirlo encontró: marihuana, 2 cajetillas de cigarrillo, una candela y basuco.
Los niños le contaron de donde provenían los elementos encontrados y le comentaron a su tío que un grupo de jóvenes del colegio tenían un negocio de droga.
Arley Felipe Gózales Hincapié, tiene 15 años y hace parte de una red que se dedica al expendio de estupefacientes. Semanalmente alguno del grupo va hasta Armenia a comprar lo que requieren para vender el fin de semana.
Gonzales Hincapié comenta: “Todos los fines de semana nos encontramos por ahí 20 pelados en la oficina que queda en las segundas escalas del mirador, ahí vendemos marihuana, perico, cocaína y basuco y también metemos; un moño de marihuana cuesta 2000 mil pesos, la cripa esta en 5000 mil pesos, y el perico y la cocaína dependiendo de lo que compren”.
Fernando Rojas Figueroa quien tiene 16 años y es amigo de Arley Felipe, asegura: “Los policías saben que metemos pero no nos dicen nada, ellos nos dejas lo que no nos permiten es robar”.
La comunidad en general se muestra preocupada por esta problemática que se está presentando, Margarita Sánchez Ríos madre de familia comenta: “Es aterrador todo lo que se está viviendo en Salento referente a este tema, cuando mis hijos salen de la casa tengo el temor de que se vayan a hacer algo malo, las amistades de hoy en día no aportan para nada”.
Es así como los hermosos paisajes de Salento se mezclan con la problemática juvenil de este municipio, la cara amable del turismo se entrelaza con un negocio manejado por menores de edad quienes aprovechan la riqueza turística de su pueblo para llenar sus bolsillos de dinero.
Escrito por:
Marlly Ximena Llanos
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